domingo, 16 de octubre de 2011

La cocina es arte


Crecí en una familia sencilla. Tengo la suerte de tener una madre que se ha desvivido por mí. Recuerdo las tardes en que la pobre intentaba hacerme entender que no se podían sumar monedas con caramelos. Pero si es mío ¿Porqué no puedo? le preguntaba. Y no salía de mi concepto propio de matemáticas.

Esto también pasa con el arte. Si yo considero arte una cosa determinada ¿Porqué otra persona me tiene que decir lo contrario?

En el libro El factor ¡Wuau! El papel de las artes en la educación, la escritora, Anne Bamford, deja muy claro, entre otras cosas, los diferentes conceptos de arte alrededor del mundo: la caligrafía en China, en Bután dividen las artes en tradicionales y modernas... Llegamos a la conclusión que el concepto de arte que tenemos es muy reducido. Delimitamos y creemos ser jueces capaces de distinguir qué es arte y qué no, sin importarnos a veces el punto de vista de los demás.

Tuve la suerte de crecer junto a un hombre totalmente renacentista, aunque creo que lo ha descubierto hace relativamente poco. Me acuerdo que de pequeña iba a ver a mi padre trabajar en la cocina. Inmerso en su mundo me sonreía y seguía caminando rápidamente por el largo pasillo de la cocina, unas veces con fruta, otras con una tarta enorme, con colores suaves que invitaban a probarla.

Poco a poco fue desarrollando sus propios platos y hace unos años descubrió el azúcar y sus grandes posibilidades. Muchos le dijeron que era muy difícil realizar figuras de azúcar y menos de según qué tamaño, pero él pensó que si otra persona podía hacerlas él, también.



Años después empezó a escribir sus recetas de cocina. Sigo observándole con el mismo semblante ceñudo, concentrado en sí mismo, en lo que tiene que escribir. Además, por si fuera poco, realiza las fotos de los libros, creando la imagen perfecta, eligiendo el plato que haga resaltar adecuadamente la receta.

Pero lo que más me sorprende es que, poco a poco, se ha acercado a la escultura, tanto de azúcar como de hielo, preparando numerosas puestas en escena: luces, hielo sintético para que haga humo, colores... Y es que nunca ha dejado de imaginar. En su mente hay tantas cosas por explorar que no se cansa, no se agota.

Creo que ello es debido fundamentalmente a un rasgo de su carácter que no ha perdido durante todos estos años: la curiosidad por aprender de los demás y el esfuerzo continuado. La perseverancia de querer hacer las cosas bien como modo de generosidad hacia los demás.

Y es que ¿No es el arte un acto de amor? ¿Un acto de generosidad para con los demás? Os invito a que veáis y disfrutéis de sus dulces obras de arte.



http://www.lacocinaesarte.com/

4 comentarios:

  1. "Y es que ¿No es el arte un acto de amor?"
    Esa es la mejor y más absoluta definición de arte que voy a escuchar en la vida. Y lo digo muy en serio. Yo estoy convencida de que el resultado final, la conclusión, es el amor.

    Imprescindible para respirar.

    Dicho esto, me encanta cómo describes la manera de hacer de tu padre. Y sólo puedo reiterar que es un hombre maravilloso.

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  2. Muchas gracias. La verdad es que lo es y espero que se valore lo que hace. Se lo merece.

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  3. estudio cocina ._. en mis planes de futura abrire un restaurante/bar, preguntare a lali, llegado el momento...te pedire el numero de tu padre

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  4. Ningún problema, él está siempre dispuesto a ayudar. Cuando lo necesites házmelo saber. Gracias por escribir!

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